La educación a distancia: creación de comunidades y de vínculos
Las propuestas de educación a distancia tienden cada vez más a conformar comunidades de aprendizaje. La idea de que esta modalidad es sinónimo de transitar una cursada sola o solo es una concepción que se ha transformado.
Natalia Menichetti, pedagoga del Equipo de Coordinación del Secundario a Distancia de la UBA (SAD), confirma que estudiar a distancia implica ser parte de una comunidad y estar en comunicación constante con docentes y pares.
“En el Secundario a Distancia tenemos contacto desde el momento mismo de la inscripción al programa. Además, en el taller de ingreso compartimos las biografías escolares, los miedos, las ganas, las expectativas y sobre todo, el aprender el oficio de ser estudiante a distancia y en la virtualidad”.
“Cuando una o uno comienza a cursar las materias, hay un montón de instancias de comunicación: tenemos los foros, los encuentros sincrónicos donde podemos preguntarle a cada tutora o tutor lo que nos genera dudas en las materias o cómo seguir los recorridos, y también hay trabajos que son colaborativos con compañeras y compañeros, donde vemos lo que escriben y eso nos retroalimenta”.